Por Virginia Escribano, Aires de Bohemia, ( www.airesdebohemia.com).

El decoupage es una técnica decorativa que se emplea para decorar objetos, muebles u otras superficies con figuras de papel. El término de origen francés, significa recortado. Es un arte muy sencillo, las técnicas no son complejas y el equipo necesario para llevarlo a cabo contiene artículos conocidos o fáciles de conseguir.
La calidad del resultado del mismo dependerá exclusivamente de la paciencia y dedicación con que se realicen los pasos. No se trata nada más de pegar una lámina sino que es importante tener en cuenta su preparación, la superficie donde será aplicada y el acabado final.


Esta técnica se desarrolló en Europa durante la Edad Media y el Renacimiento. Durante el año 1970, Estados Unidos hizo suyo el decoupage, aplicándolo sobre objetos de uso cotidiano como mesas, sillas, baúles, bandejas, cajas, lámparas y otros diversos objetos.
Se utilizan servilletas y papeles impresos para pegar sobre diversos soportes, como madera, tela, cerámica, metal, velas y jabones, vidrio y cerámica vidriada entre otros. El trabajo terminado trata de imitar la pintura a mano.
Su espectacular resultado no depende tanto de cómo se recorten y peguen los diseños, sino en la habilidad para lograr un conjunto armonioso, utilizando técnicas de pátinas, distribuyendo óptimamente los recortes y dando un acabo profesional con un buen barniz.
El decoupage se ha convertido en una técnica muy popular y económica, ya que ofrece una gran cantidad de estilos utilizando cosas que encontramos en el hogar como tela, madera o latas. Se trata de una metodología muy sencilla y la destreza manual requerida es mínima.


En esta disciplina, se ponen a prueba las dotes más preciadas de cada uno: creatividad, paciencia y dedicación, especialmente con los tiempos de secado y retoques y muy especialmente con la preparación previa de las superficies, aspecto clave del éxito la mayoría de las veces.


Las superficies a decorar pueden ser madera, cerámica, tela, vidrio, loza y muchas más. Un punto clave es no colocar imágenes dibujadas en un papel demasiado delgado sobre tela porque no se podrán ver los detalles más finos.


El desafío es encontrar las imágenes adecuadas. En muchos sitios las venden, aunque en realidad se pueden obtener de donde uno quiera siempre que la calidad del papel lo permita. Por ejemplo: recortes de imágenes en papel impreso, papel de regalo, fotocopias, servilletas de papel (éstas son las más utilizadas), revistas de cómics, entre otras posibilidades. También se puede utilizar telas flexibles y delgadas como sedas o gasa.


Los otros elementos necesarios en esta técnica son el adhesivo y el barniz.
La elección del adhesivo no es al azar, debe hacerse en base a la superficie que se esté utilizando. Habrá un producto específico para cada caso y es necesario asesorarse correctamente en este punto. Sin embargo, no se trata de productos extraños ni inaccesibles: adhesivo frío, barniz, adhesivo para papel mural, adhesivo vinílico entre otros.
Algo importante: si se trabaja sobre madera siempre lo más conveniente es el adhesivo vinílico, el que usan los carpinteros.


Por último y no menor: el barniz. Su elección es importante porque el barniz sintético es más resistente que el barniz al agua, y él determinará en definitiva la duración de tu decoración. Será necesario elegir el barniz en función del uso que tendrá la pieza a decorar.


Algunos consejos para que el resultado del decoupage sea un éxito.


- Tiene vital importancia planificar de qué forma vas a distribuir las imágenes antes de colocar el adhesivo, porque cuando éstas queden fijadas ya no podrás cambiarlas de lugar.
- Te sugiero aplicar el adhesivo en el reverso de la imagen, pegarlo y de inmediato untar una capa fina de adhesivo por encima, siguiendo los movimientos en dirección desde el centro de la misma hacia sus bordes.
- Para un acabado perfecto de cada pieza, aplica como mínimo 4 capas de barniz y el secreto es que dejes secar muy bien entre cada pasada.
- Un detalle muy importante al respecto, es que observes si luego de secar una pasada quedan burbujas sobre alguna parte de la superficie, así de simple la solución es perforarla con un alfiler y untar un poquito de adhesivo nuevamente sobre ese orificio de tal modo que no se note.

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