Por Yanina Plumari, Presidente de Plumari (www.plumari.com.ar).

En el cabello reside una de las claves de la femineidad, y a las mujeres nos gusta renovar nuestro aspecto de acuerdo a las tendencias de la moda o nuestro estado de ánimo. Y cambiar el color del pelo es que de una manera sencilla, rápida y no invasiva de transformar toda nuestra imagen.

Si están asomando algunas canas y la idea es mantener un aspecto juvenil, teñir el cabello brinda la posibilidad de cambiar la apariencia a un costo relativamente bajo, y de una manera casi totalmente reversible. Además, las tinturas dan un aspecto, brillo y volumen diferentes a nuestro pelo, brindando una apariencia interesante y nueva a cada tono de la piel.

En el mercado hoy hay muchas opciones. Una de ellas son los llamados “colores naturales”, que vienen sin oxidantes ni PPD y pueden aplicarse de manera directa y sencilla, sin necesidad de realizar mezclas de compuestos. Vienen en una gran variedad de tonos, y brindan a las canas el aspecto de reflejos.


Este tipo de tintura penetra en el cabello, pero no llega tan profundo como la que es permanente. Su fórmula presenta cierta resistencia al agua, pero con el tiempo se va decolorando, de modo que el tono dura de seis a diez lavados. Como es fácil de aplicar, se puede hacer en la casa.


Para conseguir un buen resultado lo mejor es comenzar con el cabello bien limpio y luego colocar el producto. Tarda entre 20 a 40 minutos en actuar, y luego se enjuaga con agua.
Este tipo de productos no requiere un mantenimiento frecuente para emparejar el color, como si sucede con las tinturas permanentes.


También puede utilizarse cuando el cabello luce apagado y sin vida, dado que realzan el color natural, y además poseen agentes reparadores que lo nutren y dan brillo.

Muchas mujeres comenzaron a usar tinturas naturales para cambiar su imagen por un lapso breve. Estos colorantes derivan de fuentes vegetales y se usan desde hace siglos. Una de las más populares es el Henna, una especie vegetal cuyas hojas se dejan secar y se procesan, utilizando el polvo resultante para teñir el cabello. Brinda una gama de colores que va desde el marron oscuro al rojizo, y desde rojizos más claros a rubios rojizos. Sin embargo, no sirve para aclarar el color del cabello.


Para quienes comienzan a tener sus primeras canas, una alternativa muy eficaz para disimularlas son las mechas. Se puede cambiar el tono del pelo en general y luego realizar un trabajo puntual, para que todo el pelo tenga una apariencia más pareja, o hacer las mechas directamente sobre el área donde hay más canas.


Por último, aunque haya pocas canas estas pueden ser rebeldes. Para esto hay aditivos anticanas, que se añaden a la tintura y garantizan un ciento por ciento de efectividad, siendo compatibles con todas las coloraciones. Al preparar la fibra capilar para que los pigmentos colorantes penetren con mayor facilidad, logra una total efectividad aun contra las canas más gruesas, dejando un color uniforme en todo el cabello.

En cualquier caso es fundamental que luego de la tintura se haga un mantenimiento del cabello con baños de crema y ampollas reparadoras, para tenerlo en óptimas condiciones.

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