Funcionales, estéticos, cómodos, cálidos. Así solemos imaginar a los livings, como un espacio en el cual es posible relajarse, reunirse con amigos o la familia, pero también estudiar y hasta comer. Otra característica que usualmente le damos a estos

“Ahora son muchos los estar que se arman con combinaciones de distintos muebles, con diferentes estilos, texturas y colores. Son ambientes que se acercan a las estéticas eclécticas, románticas y hasta kitsch. ¿El resultado? Lugares realmente acogedores”, asegura la arquitecta Eleonora Mendoza, integrante del equipo de Fontenla (www.fontenla-furniture.com).


Esta especialista afirma que el mercado hoy ofrece nuevas maneras de reemplazar un sillón. Por ejemplo, “se están incorporando elementos originales como colchones estilo antiguo que sirvan como asientos y respaldo tapizado en telas muy especiales, divanes cama adaptados al espacio del living y se ha incorporado también la chaise-longue como mueble de asiento no individual. También se ven banquetas con apoya brazos en los laterales, éstas reemplazan por lo menos en cantidad de lugares a los asientos que son compensados con varios sillones de un cuerpo. Estos últimos, si tienen respaldo brindan mayor confort”.


Por su parte, Susana Piazza, diseñadora y creadora de Cuatro elementos (www.4-e.com.ar), hace hincapié en la correcta elección de los materiales, pues ellos darán la personalidad final a la decoración. “Las telas son protagonistas a la hora de unificar los diferentes asientos. Esto no significa que hay que tapizar con el mismo género todas las piezas o repetir el tono, si no que tienen que crear un propuesta cálida combinando cuero con terciopelos, tussores de lindos colores mezclados con algodones en tonos tierra. A esto se puede sumar un puff de suave lana de oveja junto a algodones de telar y seda. Son muchísimas las buenas mezclas que podemos hacer e incluir elementos de la decoración tradicional”, describe.


Nueva disposición


Al no estar el sofá que suele estructurar la distribución del living, la ubicación de los muebles también cambia. “En estos casos las mesas bajas dejan su lugar central y se colocan más sobre los laterales. Otra opción muy práctica son los pufs que cumplen la doble función de ser asientos y también mesas de apoyo”, cuenta la arquitecta Gabriela Minati, socia de Chimi Churri (www.chimichurrihogar.com.ar).


En esta línea de diseño se refleja también la postura de Piazza. Esta decoradora asegura que al no tener a la mesa ratona como mueble fundamental, necesariamente hay que “buscar la manera de que todo sea completamente desestructurado y equipar el ambiente con pequeñas mesas de costado que pueden conseguirse, por ejemplo, usando un lindo baúl cerrado, algunas cajas grandes encimadas o simplemente alguna mesa de luz que heredamos”. Minati advierte que, “por lo general, sobre todo en las casas con estéticas más tradicionales, estos livings sin sofá suelen ser un segundo estar más informal, muchas veces destinado a los jóvenes y para reuniones con amigos”.


Por último, en un monoambiente o en espacios pequeños el living cobra mayor importancia pues se vuelve multifuncional, por eso es tan importante darle una solución efectiva. “Contrario a lo que se puede suponer, para éstos cuartos lo mejor es apelar al sillón, pues éste tiene poder de síntesis. Luego se puede complementar con algunos pufs multifunción o almohadones”, resume la socia de Chimi Churri.

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