Por Arq. Alejandra Mastenbaum, socia de Línea D Interiorismo (www.lineadinteriorismo.com.ar)

El pequeño pero acogedor, además ofrece posibilidades para refaccionarlo. Cuando se encuentra un departamento así es difícil negarse, pues para una primera vivienda suele ser una opción cómoda y segura.


Tener buenas ideas para decorarlo y repartir los ambientes suelen ser las claves para aprovechar bien el espacio.


Para empezar, integrar ambientes es una herramienta fundamental, pues aporta mayor fluidez y da movimiento al departamento. Para esto es necesario contar con el asesoramiento de un arquitecto que mire planos y de directivas. Otro recurso que da buenos resultados es diseñar arcadas en lugar de colocar puertas, pues éstas necesitan lugar para abrir y cerrar, y restan metros de pared en la que no se pueden colocar accesorios.


En las unidades chicas, los espejos son los grandes aliados, pues multiplican visualmente el espacio. Hay que tener mucho cuidado con lo que reflejan, porque entonces el resultado puede ser el contrario al buscado. Esta bueno que muestren un jardín, un balcón con plantas o una ventana.


Otro elemento que da mayor sensación de amplitud son los grandes ventanales. Igualmente, se debe prestar atención a lo que se ve a través de ellos, si la vista no es muy feliz, se pueden utilizar vinilos esmerilados que dejen pasar la luz y no las visuales. Otras opciones son cubrirlos con plantas o utilizar cortinas livianas (en colores claros o materiales naturales).


En los últimos años se han impuesto las cocinas integradas, si bien esta es una solución factible, no es recomendable para quienes saben que no podrán tenerla ordenada. Tampoco son funcionales en las casas donde se cocina mucho, pues los olores invadirán el resto de los ambientes.


En cuanto al equipamiento, hay que dar prioridad a todo aquello que resulte práctico, como las mesas bajas combinadas con puff (pueden venir integrados ), sofás tipo diván, barras para desayunar y ahorrarse la mesa de la TV colgando el LCD con placas tapacables. Nunca hay que escoger sillas enormes o elementos solo decorativos.


Los lugares de guardado son uno de los grandes temas a resolver. Como primera medida: hay que desprenderse de lo que ya no se usa. Luego, apelar al ingenio y elegir muebles con opciones, como una cama con cajones debajo, alacenas escondidas, estantes altos y tener cajas y baúles que pueden usarse como asiento en una reunión.


Por último, la paleta a elegir dependerá de los gustos de cada propietario. Si bien los tonos claros siempre ayudan, a veces poner un toque de intensidad cromática aporta personalidad al espacio.

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