Por Arq. Alejandra Mastenbaum, socia de Línea D Interiorismo (www.lineadinteriorismo.com.ar )

Tener arte es una elección muy personal, tanto en la decisión de incluirlo como pieza decorativa hasta qué autores o formatos nos gustará ver a diario. Algunos optarán por cuadros, otros por esculturas y también es posible transitar por las distintas vertientes que los artistas nos ofrecen.

También hay que rescatar las distintas variantes del arte, pues para muchos éste será la llama de lana tejida que trajeron de su último viaje al NOA, mientras que para otros el dibujo de su hijo con un lindo marco ya constituye una pieza que los inspira. Otra opción es tener una pared con distintos marcos con fotos familiares o hasta una composición fotográfica. Y, por supuesto, hay quienes solo considerarán arte una obra firmada, como por ejemplo, un cuadro de Milo Locket, el plástico argentino que más vende en la actualidad.

En relación a los cuadros o esculturas, salvo el caso de los coleccionistas, lo más importante es que al dueño de casa les gusten.
Los decoradores solo pueden dar su percepción y pedirle al galerista una orientación respecto del valor en el mercado del artista creador de la obra. Igualmente, hay que saber que los que van a convivir con la obra son quienes habiten el hogar, y a ellos los debe movilizar.

Para elegir qué artista lucir en un muro, muchas personas se interesan en saber de la historia del creativo que van a adquirir, conocer sus premios, ver su trayectoria y las búsquedas que ha realizado. También hay a quienes les interesa saber del valor en el mercado del autor. Las variables son muchas, solo hay que conocer qué pretende cada uno para su casa. Además, no a todos les gusta incluir arte en la decoración, por eso siempre hay que respetar los deseos de cada uno

En cuanto a cómo incluir la pieza en el diseño de interiores es una de las mayores consultas, es que no hay reglas, y por eso se generan dudas. Las obras no deben combinar con los colores de la decoración y no hay tendencia en esto, son elementos en sí mismos, con identidad propia. Sí hay artistas que están “más de moda”.

Por ser artista plástica, me gusta el arte y creo que practicarlo en cualquiera de sus disciplinas es saludable y enriquecedor; consumir y rodearse de obras artísticas también. Alimenta el espíritu y genera riqueza.

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